Un instante...
La vida inicia en un instante de calor; ese momento cuando se enciende una llama que cambia todo e inicia el conteo regresivo hacia las experiencias que colman nuestra existencia y nos conducen al final. En el fondo, todo es simple; los días van y vienen sin cesar hasta que tomamos decisiones que alteran el curso de nuestros pasos, y mientras tanto, vamos de beso en beso, dejando que cada rostro nos vea, que cada bocanada nos arrope y que los segundos se deslicen entre los dedos y entre curvas que acariciamos y dejamos ir. No es cosa de tiempo, estoy convencido que cada vez me queda menos y disfruto cada instante con un propósito evanescente, con una convicción total que cumplo mi deber ante la realidad porque, al final, no es el tiempo que vivimos sino cómo lo vivimos lo que cuenta. La vida inicia en un instante y es muy corta, siento que la mía ya casi termina entre los dedos de alguien más; la vida es un suspiro, sobretodo, cuando eres simplemente un cigarrillo.
